Panadero resurge en la victoria del Zamora ante el Guijuelo

Un gol de ubriqueño Panadero en el minuto 83 abrió el camino de la victoria del Zamora CF sobre el Guijuelo en el partido correspondiente a la décima jornada del grupo 1 de la 2ª RFEF y en el que el conjunto zamorano ofreció su mejor versión tras un arranque irregular de la competición liguera. El choque terminó finalmente con un 3 – 0 a favor de los zamoranos, lo que les permite situarse a tan solo tres puntos de la zona de playoffs.

Para Francisco Panadero fue además su primer tanto de esta temporada en la competición liguera, con lo que el gol supuso una auténtica catarsis ya que, como él mismo ha reconocido, “estaba pasando un mal momento, no estaba teniendo muchos minutos, no terminaba de encontrarme. Estaba teniendo ciertos problemas que hacían que no diese el nivel que sé de sobra que tengo, que sé de sobra que puedo dar. Este gol como que te quita un peso de encima, te hace ver que el trabajo al final tiene su recompensa y espero que sea el primero de muchos que me queden este año”.

Panadero espera que esta victoria haya sido un punto de inflexión para el equipo, ya que parece haber encontrado la buena senda tras enlazar dos victorias consecutivas y tres jornadas sin perder. Así ha explicado que “el equipo llevaba varias semanas trabajando muy bien, hemos corregido ciertos aspectos que creemos que eran los que estaban fallando y que no nos hacían terminar de sumar de tres en tres”. Por ello ha afirmado que esta última victoria “anímicamente nos da un moral increíble”.

El inicio de la liga no fue fácil para el equipo zamorano, que solo ganó un partido de los cuatro que disputó en el mes de septiembre, lo que para un equipo recién descendido de 1ª RFEF y con el objetivo claro de pelear por el ascenso directo se tradujo en dudas y nervios por unos resultados que no terminaban de llegar. En este sentido, el ex jugador del Langreo, Levante B o Sevilla Atlético, entre otros, ha reconocido que, a pesar de la buena imagen que dio el equipo en pretemporada y en Copa, en estas primeras jornadas de liga “había ciertas situaciones que no sabíamos ni cómo llamarlo. En todos los partidos nos expulsaban a algún jugador o nos pitaban un penalti en contra, situaciones que son difíciles de explicar. Creo que anímicamente el equipo arrastraba como que siempre era a ver cuándo pasa ese error y cómo lo remontamos”. No obstante, ha asegurado que “ya tenemos la madurez futbolística para controlarlo. Hemos corregido ciertos aspectos y el trabajo que hace el míster es espectacular”. Por ello ha comentado que “pensamos que haciendo las cosas bien tenemos que conseguir este año el ascenso sí o sí, y si el club sigue creciendo como lo está haciendo, estoy seguro que no tardaremos mucho en ver al Zamora en el fútbol profesional”.

En lo personal, Panadero que ha señalado que la adaptación “está siendo muy buena. Desde que he llegado el club me acogió muy bien. La ciudad es preciosa, da gusto vivir allí. Tiene de todo y es muy fácil llevar la vida allí”. A esto hay que añadir que el equipo cuenta con “un vestuario de diez. A pesar de ser 20 jugadores nuevos hemos hecho una piña, un grupo en el que da gusto estar, que da gusto ir a entrenar”. A pesar de arrancar la pretemporada como titular, en la primera jornada de liga sufrió una expulsión que le hizo perderse los dos siguientes compromisos, por lo que perdió algo de protagonismo: “El míster empezó confiando en mí, empezó poniéndome de titular, jugando muchos minutos, tanto en pretemporada como en la Copa y quizás esa expulsión fue un poco un lastre, una cosa que arrastré durante varias jornadas”. En este sentido ha reconocido que tiene una alta autoexigencia “que es la que me ha hecho conseguir lo que me he propuesto”, pero que provoca demás que “cuando las cosas no salen bien, mentalmente se hace muy duro”. No obstante, parece que poco a poco está recuperando sensaciones y con su estreno como goleador liguero “se me quita ese peso de encima y ahora parece que ves las cosas de otra manera totalmente distinta”. De esta manera ha confesado que “físicamente creo que estoy en un momento, si no el mejor de mi carrera, de los mejores. Me encuentro bien, no tengo molestias y eso te hace afrontar las cosas mucho mejor”. DE ahí que no haya dudado en afirmar que “tenemos claro que el equipo puede competir con quien sea y estoy seguro de que antes de Navidad vamos a estar ahí arriba”.